El Ayuntamiento de Ponferrada ha sacado este viernes a exposición pública por un plazo de 15 días el texto del borrador de la ‘Ordenanza sobre la creación, gestión y accesos de la zona de bajas emisiones de Ponferrada’. Este texto puede consultarse en este enlace de la web municipal(CLIC).
El establecimiento de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), es una obligación legal ineludible para todas las ciudades de más de 50.000 habitantes tras la aprobación de la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de Cambio Climático y Transición Energética, que especifica que estas zonas de bajas emisiones serán definidas y reguladas por las entidades locales por medio de ordenanza municipal, que podrá estar incluida en las normas de movilidad sostenible o como norma propia.
Entre los aspectos más relevantes del proyecto de ordenanza que se somete a información pública figuran los vehículos que tendrán acceso al perímetro de la ZBE.
La Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Ponferrada, que como las del resto de ciudades españolas, de más 50.000 habitantes, tendría que estar activa al inicio el próximo 1 de enero de 2023, sin embargo, este no será el caso de la capital berciana. Una situación que nace del retraso de la percepción de subvenciones y ayudas con las que ejecutar las obras del centro de la ciudad, y que rondarán lo más de 3 millones de euros. La oposición política de Ponferrada, concretamente USE y PP, critican el aplazamiento de la ZBE tachando la decisión de "electoralista", a lo que el edil de Sostenibilidad Ambiental y Urbanismo, Pedro Fernández, responde para InfoBierzo que es una decisión "realista".
Así, se especifica que podrán acceder y circular por las calles del interior del perímetro de la ZBE los vehículos con distintivo ambiental de la Dirección General de Tráfico 0 y ECO, además de, bicicletas, ciclos y vehículos de movilidad personal eléctricos. También con carácter general podrán acceder a la ZBE los vehículos de cualquier clase que accedan al parking de Pérez Colino.
Las distintas actuaciones que se están llevando a cabo en la ciudad, como en Huertas del Sacramento, Antolín López Peláez, en la calle Navaliegos, calle Eladia Baylina, calle Real, se enmarcan dentro del proyecto "Ponferrada 4.0, aire limpio y calidad de vida", seleccionado por los Fondos Europeos, al que se le concedieron 2,4 millones y el Ayuntamiento pone casi 900.000. "-El proyecto- responde a hacer mejor la vida de un entono importante de la ciudad, más saludable. Las ciudades de más de 50.000 habitantes tienen que tener en 20213 una Zona de Bajas Emisiones y las restricciones en Ponferrada serán mínimas", explicó el alcalde de la ciudad, Olegario Ramón, durante la presentación de la peatonalización de la calle Real.
Sin embargo, según la futura instauración de la Zona de Bajas Emisiones de Ponferrada, afectará una parte importante del parque móvil de la ciudad. Un total del 39,6% de los vehículos de la capital del Bierzo se verán impactados, todos ellos sin etiqueta.
El caso de Ponferrada es el de la mayoría de ciudades de España y es que solo el 13% de las ciudades cumplirá su obligación de tener zonas de bajas emisiones antes de 2023, principalmente las que ya lo tenían, como Madrid y Barcelona.
La implantación de la Zona de Bajas Emisiones viene obligada por la legislación nacional y europea, que la hace extensiva y obligatoria a todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, como es el caso de Ponferrada. La cantidad incluida en la ayuda del Gobierno con cargo a los fondos Next Generation se verá incrementada con la aportación del Ayuntamiento de Ponferrada, que asciende a 850.132,84 euros, por lo que la inversión se eleva a un total de 3,3 millones de euros en un plan que debe estar ejecutado antes de que concluya 2023. En ese sentido, los proyectos deben estar licitados antes de finales del mes de abril de este año y adjudicados en un 50% al menos antes de que concluya noviembre de 2022.