El jugador de la Deportiva Ponferradina Markel Lozano atendió a los medios para hablar de la actualidad del equipo antes de visitar al Celta Fortuna el sábado (19 horas). El vasco espera una mejoría en Balaídos después de caer en Fuenlabrada: «Todas las derrotas duelen. Lo que queda es trabajar y trabajar para preparar el partido», precisó el centrocampista vizcaíno, que recordó que «nadie quiere perder. Más en la situación en que estamos ahora, que estamos arriba y si pierdes se te echan encima», recalcó el vizcaíno, que asume la dificultad del próximo rival: «Está en una racha buena, gana con victorias abultadas. Esta liga está muy igualada y nunca se sabe cuándo pueden perder», puntualizó el jugador vasco, que considera que «juegan mucho al fútbol, les gusta mucho el balón».
Por otro lado, recordó el jugador vasco que «siempre gusta estar primero. Seguimos arriba», aclaró el deportivista, que añadió que «el Dépor está cerca». Es por ello que no descarta recuperar el liderato, aunque, aunque asume la exigencia de la Primera RFEF: «Los rivales te conocen más, saben tus puntos débiles. La segunda vuelta es más difícil porque los de abajo aprietan más», explicó Lozano, que reconoció que «el partido en Fuenlabrada es un partido malo. Somos capaces de dar mucho más», precisó el mediocampista, que justificó la derrota en «el fútbol que propone el rival y las condiciones climatológicas». Por ello, apostó por «mejorar los errores que se cometieron», aunque le preocupa que el Celta «sea el equipo que más goles mete. Nos beneficia saber que defensivamente es más fácil que otros», matizó.
Por otro lado, fue cuestionado por la expulsión en Fuenlabrada del entrenador de la Deportiva, Íñigo Vélez, lo que le acarreó una sanción de dos partidos y 600 euros. El centrocampista blanquiazul se inhibió y no quiso dar una opinión porque aseguró que no estaba cerca de la acción. Reconoció, eso sí, Lozano que el preparador vitoriano «es el responsable del banquillo y tiene que controlar lo que pasa en él». No cree tampoco que suponga un gran problema el hecho de que no pueda estar en el banquillo de Balaídos ni en el Toralín frente al Lugo: «Desde dentro te das cuenta de menos cosas».